Lucas 10,1-9 | Comentario:
Jesús no entiende su misión de anunciar la llegada del Reino de Dios como una empresa personal. Jesús se sabe enviado, pero se sabe enviado en medio de la humanidad. Muy pronto Jesús se rodea de gente amiga. Muy pronto se genera lo que los exégetas llaman un “movimiento” alrededor de Jesús, gente que lo sigue, que lo acompaña. Y Jesús comparte el día a día con ellos, y comparte también la misión, por eso los envía de dos en dos a proclamar la llegada del Reino.
“Yo los envío como ovejas en medio de lobos”. Jesús es consciente que la tarea no es fácil, lo experimenta él mismo cada vez que los escribas, fariseos y saduceos vienen a cuestionarlo y criticarlo. Sabe que harán lo mismo con sus discípulos. Pero eso no lo detiene. Hay una misión que cumplir, llevar la paz a los hogares de la gente, ganarse su salario, vivir de manera sencilla, curar a los enfermos y anunciar el Reino. Esa es también hoy nuestra misión como seguidores de Jesús.